Coaching en tiempos de Pandemia

Los días pasan, poco a poco, hasta que de repente tomas consciencia de que pronto será el aniversario del inicio del encierro histórico debido a la Pandemia del COVID19.

Quienes éramos hace un año como sociedad poco tenemos que ver con el ahora, grandes cambios estructurales y personales hemos vivido. Sin embargo, no siempre nos paramos a reflexionar sobre nosotros en el presente, y hacia dónde queremos ir.

Al ver un entorno cambiante y complejo que no controlamos, podemos caer en la tentación de “dejarnos llevar”, una opción que no es mala si se toma de forma madura. Es decir, dejar fluir no es sinónimo de estar narcotizado, no. Permitir que transcurra la realidad es una posibilidad que nos ayudará a tranquilizarnos, pero en paralelo debemos trabajar nuestras emociones, reconocerlas, de modo que mantengamos la consciencia presente en todo momento. La RAE define una emoción como una “alteración del ánimo intensa y pasajera, agradable o penosa, que va acompañada de cierta conmoción somática”.

Es importante tener claro que no existen emociones “buenas ni malas”, todas las emociones son lícitas, y es oportuno preguntarse, una vez definida la emoción que sentimos, si ésta nos empodera o nos limita.

Por ello, es necesario que tomemos un espacio para la reflexión sobre cuál es nuestro estado interno. Reconocer y definir las emociones es un gran primer paso para gestionar de forma saludable la situación actual: ¿Qué emoción/es estoy sintiendo? ¿En qué parte del cuerpo? ¿Qué nombre le pongo a estas emociones? ¿Me puede servir esa emoción? ¿quiero que esté conmigo o la dejo ir?

También, a pesar de las circunstancias, no debemos olvidarnos de nosotros mismos, por ello tener en mente hacia dónde queremos ir (o hacia dónde no), y quiénes queremos ser son tareas, no siempre sencilla, que podemos plantearnos. La situación mundial provocada por el COVID19 no viene para quedarse, tal vez vamos a implementar nuevas estrategias como sociedad, y algunos hábitos serán añadidos en nuestro día a día, pero el futuro continúa siendo tuyo. Y tú, solo tú, puedes decidir hacia dónde quieres ir.

Te invito a ver el siguiente vídeo en el que hablo sobre las creencias, un tema de coaching muy interesante y útil: